La tarta helada que no iba a ser helada...

Hola amigos!
Esta tarta en teoría no iba a ser helada, pero... como hice algo mal y la crema me quedó muy blandita... tuve que congelarla, pero puedo asegurarles que helada queda deliciosa! Y muy oportuna para los calores que estamos padeciendo por estos lados.

No le saqué fotos a la tarta entera porque había quedado tan mal que no pensé subirla al blog, pero hoy la vi congelada (y a medio comer) y dije, "si es deliciosa, la tengo que compartir".

 Para empezar, la masa para la base, es muy fácil:

• 1 huevo
• medio pocillo de aceite de girasol
• medio pocillo de leche
• Harina leudante (de repostería) c/n

En un bol, ponemos el huevo, le añadimos los líquidos, mezclamos un poco y empezamos a incorporar harina, mezclando hasta obtener una masa que podamos extender, con esta masa cubrimos el fondo y los bordes de un molde, y la cocemos. 

Relleno: 

• Medio litro de leche
• Una rama de canela
• Esencia de vainilla
• 4 yemas de huevo
• 3 cucharadas de azúcar
• 2 cdas. de maizena (almidón de maíz)
• 4 peras
• Azúcar

Ponemos a calentar la leche con la rama de canela y la esencia de vainilla. Batimos las yemas con el azúcar hasta formar una crema, y la incorporamos a la leche, revolviendo. Cuando está cerca del hervor, añadimos las 2 cdas. colmadas de maizena diluidas en un poquito de leche, y no dejamos de revolver hasta que se forme una crema.
Aparte, pelamos y trozamos 4 peras, y las ponemos a caramelizar en una sartén con azúcar. Cuando hayan caramelizado, las añadimos a la crema, y con esta mezcla cubrimos la base de la tarta.
Llevamos al freezer, hasta que esté bien fría... es una delicia!

Por encima le coloqué chispas de chocolate blanco y negro...
Espero que la preparen y la disfruten, es realmente exquisita.
Saludos a todos y hasta la próxima...!!!